Aunque bastante se ha hablado de este fármaco para ayudar a combatir la alopecia androgenética y sus posibles consecuencias en el rendimiento sexual, recientemente la International Society of Hair Restoration Surgery (ISHRS; Sociedad Internacional de Cirugía de Restauración del Cabello) publicó un artículo en el que desmentía estos efectos adversos y señalaba otras posibles circunstancias que podían causar este resultado secundario.
¿Cómo se sabe que la finasterida no causa disfunción sexual?
Según el estudio realizado por la ISHRS –uno de los organismos más importantes a nivel mundial en el tema de restauración capilar—, tras realizar una encuesta de desempeño sexual a 663 usuarios de finasterida y comparar las respuestas con los de un grupo de control de 99 hombres que no utilizaban el medicamento, los resultados no fueron muy distintos.
Para llegar a esta conclusión, las preguntas que realizaron a ambos grupos –que además pertenecían a diversas edades desde los 18 hasta mayores de 50 años— las hicieron en relación con una escala de experiencia sexual, tiempo de uso del fármaco, y presencia de afecciones como pérdida de lívido y disfunción eréctil.
Al contrario de lo que podría pensarse, los individuos que utilizaban finasterida reportaron un ligero mejor desempeño sexual según la encuesta, por lo que se deduce que los problemas en la cama tienen otro origen, tales como:
- Autoinformación: estudios han identificado que efectos sexuales secundarios por el uso de esta droga se deben probablemente a que los pacientes han sido inducidos a pensar en las consecuencias adversas, y no ya por la propia acción farmacológica.
- Aumento de la edad: siguiendo la encuesta de la ISHRS, los grupos de edad más avanzados, usuarios y no usuarios de finasterida, reportaron igualmente disminución del rendimiento sexual.
- Depresión: este trastorno, relacionándolo con la alopecia, se origina de una percepción de la imagen personal negativa y el deterioro psicosocial que se deduce de ello, especialmente en hombres de 18 a 40 años que, al padecer de pérdida de cabello de moderada a grave, presentan mayores complicaciones para llevar una sexualidad plena.
¿Por qué se asociaba entonces a la finasterida con la disfunción sexual?
Desarrollada originalmente para tratar la hipertrofia prostática benigna (agrandamiento de la próstata), y adoptada después para detener la alopecia androgenética luego de observar mejorías en la salud capilar de los pacientes que la usaban, la finasterida logra esto inhibiendo la conversión de la testosterona en dihidrotestosterona, una hormona que sirve para el desarrollo de las características masculinas, como vello facial, voz grave y musculatura.
Su prescripción médica, sin embargo, se hace de forma especializada para evitar efectos adversos y brindar beneficios probados por compañías farmacéuticas, ofreciendo resultados para la alopecia en un lapso de 3 a 6 meses.
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